12.12.2008

.: Tristeza en el alma

Debemos hacer algo ya, es nuestro deber y nuestra responsabilidad desde el instante mismo en que percibimos y asimilamos conscientemente esta triste realidad que estamos viviendo como sociedad, como humanidad.

Y esta realidad, que parece tan ajena, aviva la tristeza en el alma, quema por dentro. Sin embargo, vivimos nuestras vidas y el tiempo transcurre mientras otros sufren a nuestro lado.
Me pregunto, ¿cómo es posible que sigamos adelante, como si nada ocurriese, construyendo sobre tanta pobreza?.

Debemos hacer, todos, un esfuerzo por alcanzar la humildad, rescatar nuestra esencia, replantearnos nuestra identidad como sociedad y a partir de allí ayudarnos para crecer juntos.
Cada pequeña acción es en suma, al final de los días, el resumen de quienes fuimos, de quienes decidimos ser y de quienes somos; de allí la importancia de elegir, incluyendo en cada elección al prójimo.

Nuestros hermanos nos necesitan, necesitan que nos unamos, que elevemos nuestra voz y nos hagamos escuchar por ellos, porque los han marginado, los han dejado sin voz...

LBL

1 comentario:

Anónimo dijo...

Me encantó lo que escribiste. Ojalá podamos unir nuestras voces dejando odios y revanchas estúpidas que lo único que nos hacen es daño. Ojalá que nos podamos unir y tiremos todos del mismo carro para ayudar por sobre todas las cosas a los que más nos necesitan y no son escuchados por nadie.

Alejandra Goity